Nuevo estándar para la compresión de vídeo:
HEVC/H.265
HEVC/H.265 es el nuevo algoritmo para la compresión
de vídeo
Es una extensión de las soluciones H.264 usando
unos algoritmos de búsqueda más eficientes
El tamaño de los ficheros de vídeo es
aproximadamente la mitad que con el códec H.264,
con el cual a su vez son la mitad del previo códec
MPEG-2
La calidad de imagen es más fluida y placentera
cuando las tasas de bit están restringidas.
HEVC/H.264 se está convirtiendo en la tendencia
principal como heredero natural del H.264
La compresión extra proporcionada por H.265
se traduce en un fichero más pequeño
La especificación H.265 proporciona
formas adicionales para dividir una imagen en
bloques de diferente tamaño incluyendo
la habilidad de usar bloques de mayores dimensiones (64x64 vs. 16x16), proporcionando
eficiencias de compresión avanzadas.
Esta mayor eficiencia -entre un 25 y 50%- se
traduce en menores tasas de bit.
Mayor calidad de vídeo proporciona una
calidad de imagen más fluida.
Los modos de predicción intra requieren
una computación de codificación más
avanzada, pero permiten reusar la información
adicional, resultando en menores tasas de bit. El
resultado neto de los modos de predicción
adicionales junto con los tamaños variables
en los bloques es un menor tamaño de
archivo de vídeo con un efecto más
suave de difuminado en lugar de los efectos escalonados
que se ven en el H.264.
¿Por qué triunfará el códec
HEVC/H.264?
HEVC/H.265 proporciona el potencial para reducir
drásticamente el coste de difusión
de vídeo en todos los perfiles multimedia
y proporcionar nuevos niveles de calidad de vídeo.
Se basa en la tecnología H.264 y tiene el
soporte de varios estándares y organizaciones
así como multitud de compañías
que desarrollan productos basados en este estándar.
El ecosistema 4K
Contenido de vídeo: para que el vídeo
sea un auténtico 4K, el contenido debe tener
una resolución de 3840x2160 con una tasa
de refresco de 60 fps.
Codificación: la mayoría estamos
familiarizados con H.264, el estándar de
vídeo para en contenido HD convencional.
La próxima evolución de la misma tecnología
es H.265, o "High Efficiency Video Enconding".
Este interpreta el contenido 4K extremadamente rico
en datos en formas mucho más eficientes para
proporcionar resolución 4K nativa a 10 bits
por canal y 60 fps para una imagen suave y de alta
calidad a una tasa de bit controlable.
Nota: mientras 4K lidera la transición a
H.265, este nuevo códec también favorece
el contenido 1080p. Las comparaciones actuales muestran
que H.265 es el doble de eficiente que H.264 al
comprimir contenido 1080p.
Decodificación: Un auténtico
reproductor 4K debe ser capaz de descodificar el
contenido a su forma original -3840x2160 a 10 bits
y 60 fps.
Salida: Una vez los contenidos se decodifican,
están listos para enviarse al monitor. Para
ello el reproductor debe tener una salida HDMI 2.0.
La mayoría de los reproductores del mercado
actualmente incorporan una salida HDMI 1.4a que
saca contenido a 3840x2160 pero sólo a 30
fps. Esto resulta en una palpablemente menor experiencia
de visionado.